Buscamos para los chicos que
concurren al taller, un primer acercamiento a la música dinámico, participativo y gratificante. Utilizando el juego como estímulo central del
aprendizaje placentero, generamos un espacio propicio para la exploración del
ritmo y el sonido a través de la voz hablada y cantada, el cuerpo en
movimiento, materiales sonoros (cotidiáfonos) e instrumentos formales ( piano,
teclado, guitarra, instrumentos de percusión y batería)
Un lugar que invita a la
expresión creativa, a participar interactuando con compañeros, a cantar por el
placer de cantar y a tocar instrumentos según las capacidades evolutivas de la edad, sumando actividades de graficación como formas de
aprestamiento a la lectoescritura musical.